Un día como cualquiera, la rutina instalada en mi mente
Casi al punto de la perturbación eterna,
Pensé buen comienzo salir con un grupo de amigas.
Juntas en la indecisión de encontrar el lugar justo
Para contarnos todo lo que nos ocupaba y preocupaba,
Caminando sin rumbo nos sorprendió un enorme anuncio:
“El que coma más frijoles será el ganador”,
nos miramos sorprendidas y a la vez desorientadas,
quien podría anotarse en semejante absurdo,
al unísono dijimos…Comer frijoles!
Imposible no es lo nuestro, que la figura,
Que el después, y todos los comentarios
Falseados de un concurso un poco extraño.
Llenas de curiosidad, como mujeres que somos,
Decidimos entrar solamente como observadoras.
OH! sorpresa la que nos llevamos,
Cuando vimos aquellas mesas bien distribuidas
Y elegantemente ordenadas para los participantes.
Sin gente aún en aquel salón, aguardamos impacientes
A que los competidores llegaran.
El tiempo se prolongó más de le esperado,
Suele suceder, pensamos, pero en realidad
Era nuestra ansiedad que lo hacía detener en el espacio.
Allí apareció uno y pronto el resto,
Todos se ubicaron hasta que se escuchó una voz
Que con micrófono en mano iba a animar ese encuentro.
Dio las pautas del concurso, mucha atención no le prestamos
Aunque una del grupo se quiso anotar al instante,
Cuanta admiración sentimos de que se expusiera a eso,
Comer frijoles, dijimos, no te parece grotesco?
Ella muy entusiasmada se sentó
Esperando escuchar que comenzaba…
A comer se puso, obviamente todas asombradas.
Habiendo terminado el tiempo establecido,
Escuchar el ganador era lo más apropiado,
El locutor sin prisa y con mucha pausa en palabras
Dio el nombre y estupefactas
al saber que se trataba de la persona en la que no confiábamos,
Nuestra amiga…!
esa que guardó el secreto al llevarnos a ese encuentro,
porque ella ya sabía y nos dejó con la intriga
hasta que recibió el trofeo.
Obviamente un gran frijol bañado en oro amarillo
tenia estampado en la base…
El que coma más frijoles será el ganador.
Gracias por participar y animarse a comer un festín poco alentador.
JYOSTI
25/02/2009
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Los libros son las alfombras mágicas de la imaginación. Jorge Luis Borges
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