Nos sorprende de repente,
la danza que armó la lluvia,
una orquesta de frías gotas
sin tregua, entre unas y otras.
Golpeando sobre el cristal,
son el sostén del encanto,
ellas forman muy despacio
entre tú y yo, un frágil manto.
Ciertamente nos bendice,
esbozaste sin más tino.
En lo profundo de tus ojos
un Ángel quedó dormido.
Acompañarte en silencio,
sin palabras que ameriten,
en este húmedo otoño,
el sentimiento hecho retoño.
Verte alejar tan pausado,
disfrutando del chubasco;
mientras mi alma taciturna
desea abrazarte, bajo la lluvia.
Jyosti 17/06/2010
la danza que armó la lluvia,
una orquesta de frías gotas
sin tregua, entre unas y otras.
Golpeando sobre el cristal,
son el sostén del encanto,
ellas forman muy despacio
entre tú y yo, un frágil manto.
Ciertamente nos bendice,
esbozaste sin más tino.
En lo profundo de tus ojos
un Ángel quedó dormido.
Acompañarte en silencio,
sin palabras que ameriten,
en este húmedo otoño,
el sentimiento hecho retoño.
Verte alejar tan pausado,
disfrutando del chubasco;
mientras mi alma taciturna
desea abrazarte, bajo la lluvia.
Jyosti 17/06/2010
**Reservados todos los derechos de autor. Obra registrada**
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