En lo profundo del río

Recostada en la orilla de un bello río serpenteante,
mientras una brisa muy suave y sutil me acariciaba
un lugareño que en ese momento pasaba
me advirtió sobre un peligro en que me encontraba.

Atónita ante tal confesión y sin recaudos
me dispuse a continuar en ese sitio para investigarlo
¿cómo podría saber que pasaba?
si a nadie veía para preguntar sobre tan concisas palabras.

El sol que entre los árboles suavemente filtraba
me iba dando junto al agua del río un reflejo
que por momentos me dejaba sin habla.
¿Era aquello verdad o una ilusión desatada?

Decidí subirme a una canoa y remar lentamente,
la detuve sin apremios y en silencio me quedé esperando.
En medio de las aguas turbias un remolino se armó
de lo profundo del río un animal gigantesco asomó.

Mi pequeña barcaza se dio vueltas y el agua me atrapó,
junto con la gran desesperación un pez me atacó
…no puedo decir que era un tiburón…
En mi absurdo aturdimiento sabía que era un delirio.

La mordida sentí en mi pierna y el dolor me atormentó,
me aferré a lo que quedaba de mi canoa y pedí compasión
…nuevamente hacía mí….ferozmente arremetió…
Solo recuerdo que al despertar, estaba en la orilla de cara al sol.


Jyosti
17/08/2009